Te enroscas a mi vientre
como un gato mimoso,
buscando mi abrazo
como un gato mimoso,
buscando mi abrazo
y mi beso.
Queriendo que,
de tu dolor
te sane,
y haces brotar
de mi pecho,
otra vez la ternura,
las ganas de amar
hasta la locura.
Veo en el fondo
de tus ojos,
la enorme amargura
que invade tu alma,
y esa misma tristeza
hace que yo me salve.
Queriendo que,
de tu dolor
te sane,
y haces brotar
de mi pecho,
otra vez la ternura,
las ganas de amar
hasta la locura.
Veo en el fondo
de tus ojos,
la enorme amargura
que invade tu alma,
y esa misma tristeza
hace que yo me salve.
3 comentarios:
¡Cuántos necesitados solos por el mundo sin encontrarse!
Agito la varita mágica para que seas salvada.
Voto para alejar la tristeza, (incluso la literaria) y reconozco que es adictiva: "Me llamo Luna y soy adicta a las almas que sufren"
Me llamo Dulce y soy adicta a los que me hacen reir, me llenan de mimos y sonrisas, y me sacan del más mínimo atisbo de amargura,... pero si ellos están tristes instinto de supervivencia se pone en marcha y salgo por patas de gata.... Me Llamo Dulce y soy mala.
Ummm…”adicta” mientras no se vuelvan unas fanáticas, o unas sometidas acérrimas…ja ja ja yo a veces también soy mala muy mala
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