domingo, 27 de julio de 2008

Hoy, solo me queda



Yo tenía fe en Jesús, me lo enseñaron de niña, en Dios, que era (debe seguir siendo) su padre. Tenía fe en el mío a pesar de sus riñas. Tenía fe en el amor, en el ser y en el vivir, tenía fe en mí. Hoy, solo me queda la fe, pero ¿en qué?

Yo creía en Jesús, en Dios, en mi padre, en el amor, en el ser y en el vivir, creía en mí. Hoy, solo me queda el creer, pero ¿en qué?

Yo esperaba a Jesús, a Dios, a mi padre, al amor, al ser y al vivir, esperaba algo más de mí. Hoy, solo me queda esperar, pero ¿a qué?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo desde niña no tenía fe, no creía, quizás esperaba...
Hoy ...que Jesus o quien sea por él, (mi padre no, pobrecito!), el amor, el ser, el vivir que crean en mi por favor, porque ya no puedo esperar aunque quisiera, el tiempo se va!

Besos

Mararía dijo...

Pero ves, el fondo es lo que queda, mi fondo es espiritual por eso sigo orando y al escribir me salen letanías como estas.

Cuando me refiero a “mi padre”, en realidad es “familia” la idea de familia,
Amor es todo pareja, amigos… el ser… humano, vivir… la vida.

Sigo teniendo fe, sigo creyendo, sigo esperando aunque no tenga muy claro el qué.

En cuanto al tiempo: no sabemos si mucho o si poco, a la vuelta de la esquina o apoyada en la misma como escribió “pejooe” nos puede esperar esa dama…

Vivamos el instante…soñemos

Dos besos

Lisandro dijo...

Tienes mucha razón, vivamos el presente pero no dejes de esperar. Hay gente que ya no espera y son más neuróticos que nosotros que esperamos.
Pobrecillos...esperemos que se curen ;)
Esperemos esperemos....

Mararía dijo...

Si Li.. yo espero siempre espero...

Dos besos y mil gracias

¡Estoy esperando también a leerte!

je je