martes, 17 de mayo de 2011

Inmarcesible

Quizá la vida, la felicidad, sea la simple suma de momentos. Eternos instantes donde la alegría es plena. Por eso hay que gravar a fuego en la memoria cada detalle, cada caricia, cada gesto… Para saborearlo cuando el día muere en ese duermevela en que realidad y sueños se confunden.

Quizá ese sea el motivo por el qué ella le observa cuando duerme tranquilo, mientras lee absorto o conduce atento.

Desde el salón vigila sus movimientos en la cocina, disponiendo café para dos, siempre para dos.

Piensa que nunca le ha parecido tan lejano y bello como en ese instante buscando el encuadre perfecto, la luz adecuada, la tensión, los planos… Creando y creyéndola inalcanzable.

5 comentarios:

LA ZARZAMORA dijo...

Y en esos instantes, minúsculos alcanzamos sin saberlo lo inmarcesible. Me encanta esa palabra.
Besos.

Riforfo Rex dijo...

¿Quizá? ¿Sólo quizá?

Dulce dijo...

Mirando para recordar.

Eira dijo...

guarda esos momentos ...

Mararía dijo...

gracias a todos por comentar.

Capitán mi capitán: quizá, quizá, quizás...